Un grupo de soldados daneses se establecen en la base militar de Armadillo en Afganistán; su misión: proteger al pueblo afgano de la violencia de los talibanes. El problema está en saber diferenciar quiénes son civiles y quiénes son militares.
Este documental danés sabe transmitir las sensaciones y sentimientos del soldado ante tal panorama: estrés, adrenalina, abatimiento, violencia, hambre de guerra, desolación...
Sin contar nada nuevo de lo que siempre hemos llegado a imaginar, la cámara te convierte en uno más del pelotón y, llegado el final de lo que se cuenta sientes el mismo abatimiento que los protagonistas pero quizá provocado por distintas razones, lo que te lleva a una distinta moraleja. ¡NO A LA GUERRA!. Un 6'5 sobre 10.
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