31 de enero de 2013

"El vuelo". Volado para volar.

Con la gran interpretación de Denzel Washington consiguiendo que su personaje pase de transmitirnos repugnancia a producir lástima e incluso empatía con el espectador. No sería de extrañar que se alzase con su tercer Oscar. Es bien sabido que a la "Academia" le gusta este tipo de papel; un alcohólico bajo la piel de un héroe. Independientemente, Denzel W. lo borda; es quizá lo más destacable del film. Un film que desde los primeros minutos te mantiene alerta con una secuencia de acción mucho más que bien llevada; sencillamente espectacular.

Pero es que el que lleva la batuta en este film no es otro que Robert Zemeckis, aquél que nos regaló una de las mejores trilogías de la historia del cine, "Regreso al futuro", así como "Forrest Gump", "Lo que la verdad esconde", "Náufrago"..., entre otras muchas. Vamos que sabe lo que se hace.

De hecho el principio del film me ha traído a la memoria el accidente de avión que tiene el personaje de Tom Hanks en "Náufrago"; espectacularmente plasmados. 

El resto es una historia relativamente original. Un alcohólico reconocido pasa de héroe nacional a antihéroe en el mismo tiempo que tarda en meterse una raya de coca. Producto muy atrayente (hablo de la peli, ejem). Un 7 sobre 10.


"Amour". Te quiero AMORir.

Quien piense que esta película habla de la muerte está muy equivocado, habla de amor, de un amor auténtico, honesto, sincero...No es de extrañar que el propio Jean-Louis Trintignant (Georges) sugiriera ese título a Haneke tras escuchar el argumento.

Estamos ante el film más íntimo del austriaco aunque respira "hanekismo" por los cuatro costados. Los planos no terminan cuando el espectador lo pide a gritos, sino cuando él ha decidido que terminen. Aunque se trate de un relato humanista al 100%, Haneke consigue que se te encoja la patata en un estado de ansiedad (y ternura) que te coge de la mano hasta los créditos finales.

El trinomio de cerca de 230 años que forman Trintignant, Riva y Haneke ha dado como resultado el film sobre amor más sincero y auténtico del cine contemporáneo. No peca de pastelismo en ningún momento, sino más bien nos muestra la crudeza de la muerte que es llevada de la manera que se lleva gracias al amor compartido durante toda una vida. Llena de metáforas y ausente de banda sonora (la única música que se escucha es la que forma parte intrínseca de la historia), el film deja mella en todo aquel ser conmovible, porque es sobrecogedoramente bella y bellamente sobrecogedora.

Las interpretaciones de Jean-Louis Trintignant y de Emmanuelle Riva están al alcance de muy pocos. Aguantan como jabatos unos planos secuencia (y fijos) de varios minutos. Citar también a Isabelle Huppert como hija de ambos. Se trata de un papel mínimo pero nos trae a la memoria aquella vez en que ella y Haneke trabajaron juntos en "La pianista" (véase -si se quiere- en este blog).

¿Cómo un director que empezó su carrera con casi 50 años ha podido ser tan influyente en el cine de hoy en día?. La respuesta sólo la tiene su filmografía. Una filmografía cargada de grandes ejercicios cinematográficos duros, bellos, hirientes, pero grandes, muy grandes. Un 9 sobre 10.

"La isla de los olvidados". El Alcatraz noruego.

Cuando por cometer algún delito vas a parar a un sitio como Bastoy, una isla en el fiordo noruego, más que tu reinserción social te someterán a duros trabajos físicos bajo una rigurosidad de la que sólo te puede salvar la huida.

Un film que peca de los estereotipos del drama carcelario, pero con sus toques de distinción; sucede en Noruega, los presos son niños entre 11 y 18 años y no sólo luchan contra la severidad del superintendente y sus secuaces, sino también con el invierno frío de esa zona del planeta.

Aunque no es un film notable, sí que es algo más que correcto; la interpretación de los chavales, así como la fotografía y la música te ayudan a llegar al final de la película, un final algo previsible pero muy bien retratado. Un 6'5 sobre 10.

27 de enero de 2013

"Django desencadenado". Tarantino sin contemplaciones.

A estas alturas nadie va a ver una película de Tarantino a ciegas; hablar de él no es hablar de un director sino de un género cinematográfico. Todos hemos puesto el adjetivo "tarantiniano" a alguna otra película (véase "Oldboy", véase "Mátalos suavemente"...). Nunca engaña y, lo que es mejor, nunca defrauda. Puede tener sus más y sus menos, pero lo que sí está claro es que Tarantino alimenta al cine de la misma manera que el cine alimenta a Tarantino en una relación sin ningún tipo de contemplación. Nos gratificó con "Reservoir dogs", nos fascinó con "Pulp fiction", nos enganchó con "Kill Bill", quiso cambiar la historia con "Malditos bastardos" y, con "Django" ha dado un golpe en la mesa del western empapándose de él.

En cuanto al reparto, cuatro nombres propios: Jamie Foxx, Christoph Waltz, Leonardo DiCaprio y Samuel L.Jackson. Foxx está radiante tanto de esclavo como de cazarrecompensas; Waltz ya ganó en "Malditos bastardos" que Tarantino contara con él para éste su siguiente trabajo y demostrado está que no le ha fallado, está impresionante; DiCaprio no para de crecer, haciendo de malo o haciendo de bueno suele bordar su papel, no es de extrañar que grandes nombres como Eastwood, Scorsese, Spielberg, entre otros, le hayan querido para protagonizar alguno de sus trabajos, en el caso de Scorsese en cuatro ocasiones y dos más por llegar...me encanta; y un casi desconocido Samuel L.Jackson, muy bien caracterizado llegando incluso a no reconocerse,...grandioso.

Ha recibido críticas, pero la más sonada es la del también director (y negro) Spike Lee, el cual ha decidido no ver "Django" al considerarla demasiado ofensiva contra la raza negra y la esclavitud en concreto. Critica el uso exagerado de la palabra negrata (nigger); considero que lo que pudo ocurrir en aquellos años previos a la guerra civil americana fue mucho más duro que una simple palabra ofensiva pero empleada eternamente en el cine, incluso en el cine de negros dirigido por negros. Es sabido que Tarantino es provocativo e hiriente visual y anímicamente, pero como él dice, "esto es un western", así que yo también digo que "esto es un western", y quien no lo quiera ver está en su pleno derecho; yo, por mi parte estoy la mar de contento de haberlo disfrutado.

Cuando ves un film con sello Tarantino tienes la sensación de estar viendo un trabajo de alguien que ha consumido mucho cine, lo ha engullido, lo ha digerido y, en lugar de depositarlo en el inodoro, ha preferido darle una vuelta de tuerca y sacarle el máximo partido. A esto se le llama aprovechar los recursos. Bravo Quentin. Un 8 sobre 10.

23 de enero de 2013

"Argo". ¡Hagamos una peli!.

Ben Affleck consigue con su tercer largometraje consolidarse como un gran cineasta. Pocas veces un actor que se pasa a la dirección cosecha más éxito en su nueva faceta, éxito de verdad, no notoriedad. Demuestra que con un buen guión y ganas de trabajar se puede hacer algo grande. 

En ciertos fragmentos consigue recordar al Steven Spielberg de "Munich", quizá por la estética setentera o quizá por la manera de contar un hecho real de un modo más que notable.

Como ya ocurriera con "The town", Affleck se dirige a sí mismo además de dotar de protagonismo al resto de secundarios de manera perfectamente dosificada. Cada uno tiene su momento e importancia dentro de la historia.

Como no hay dos sin tres, el que hizo de amigo de Will Hunting, está en la senda para convertirse en un grande del cine contemporáneo si es que todavía no lo es. Le auguro éxito en los próximos y cercanos Oscars. Un 7'5 sobre 10.

"Zero dark thirty". La noche más oscura para Osama.

Interesante película sobre lo que supuso la caza y aniquilación del terrorista más buscado (al menos por los estadounidenses), Osama Bin Laden.

Narrada de manera brillante con algún altibajo en cuanto a intensidad que, a la vez, es de agradecer si no quieres que se te acelere la patata más de la cuenta. Siempre he pensado que cuando un final ya es conocido debes plasmarlo de una manera mucho más veraz; y en este caso su directora, Kathryn Bigelow lo consigue. Un final vertiginoso que no te dejará parpadear.

En cuanto a Jessica Chastain ("El árbol de la vida", "Take shelter"...) en el papel de Maya, la agente que da con el paradero de Osama, decir que está dentro de la corrección pero ni mucho menos a la altura de ganar una estatuilla en los próximos Oscars, aunque conociendo el negocio que hay detrás de todo aquello, no me asombraría que lo hiciera.

Aunque me confieso no muy amigo de este tipo de películas en las que la todopoderosa USA se pone medallas, he de reconocer que se nos narra de una manera bastante objetiva y sin demasiado aspaviento "proyanqui". Un 6'5 sobre 10.

18 de enero de 2013

"Los tres entierros de Melquíades Estrada". Lo juro, Melquíades.

Tommy Lee Jones debuta en la dirección para el cine con un drama de los que dejan mella; una película llena de lecciones de vida y, sobre todo, de palabra.

Con una mezcla de road movie, de western y de drama, la historia te atrae con un montaje inteligente y una trama interesante. Quizá si todos tuviéramos tanta lealtad a la palabra, La Tierra sería un lugar mucho más bonito en el que vivir.

Tommy Lee Jones demuestra que tanto delante como detrás de las cámaras ha sido y será no el mejor pero sí uno de los grandes. Un 7 sobre 10.

"Café de flore". Dos en una.

Película que baila entre dos historias, entre lo real y lo onírico, entre París y Montreal, entre los años 60 y la actualidad..., que ambas tienen como nexo de unión, entre otras cosas, el amor incondicional que se tienen los personajes, en una madre-hijo y en otra mujer-marido.

Con un montaje casi vertiginoso, su calidad visual no tiene precio. Banda sonora "buenrrollista" que marida con la imagen como el queso y el membrillo. Ninguno de los actores se queda por debajo de la historia transmitiéndonos sufrimiento y felicidad en momentos verdaderamente tiernos. Si no sabes que Vanessa Paradis actúa en este película te sosprendes al descubrirla por sus dientes separados; una gran interpretación para un gran papel. El resto del reparto destacar la sensualidad que desborda la relación entre Kevin Parent y Evelyne Brochu y el sufrimiento compartido por Hélène Florent.

Un producto canadiense dirigido por Jean-Marc Vallée que si no te han hablado de ella, lo harás tú. Un 7'5 sobre 10.

9 de enero de 2013

"Caminar sobre las aguas". Cuando caigan las fronteras.

Cuando una amistad es auténtica, debería traspasar fronteras e ideologías políticas. El problema en este caso es que para llegar a esa amistad ambos protagonistas han tenido que andar con secretos, con muchos secretos. Uno más que otro.

Interesante producto israelí en el que mostrando las más que diferencias entre Israel y Palestina, nunca flirtea con el insulto sino con la elegancia y el entendimiento por parte del espectador. 

Con una historia narrada de manera simétrica -lo que ocurre en Israel, luego ocurre en Alemania-, con momentos tan "utópicos" como el ver a una familia alemana con parientes nazis disfrutando un baile típico israelí y con momentos tan de thriller como cuando el judío ve que su objetivo sigue vivo.

Se disfruta y se agradece. Un 7 sobre 10.


"Mátalos suavemente". Cine indie y negro made in USA.

Producto de cine negro que bian podría haber gustado más si hubiese estado bajo la batuta de Tarantino. Eso no significa que no estemos ante un film notable e intensamente dirigido, pero es que soy "tarantiniano" reconocido.

Bard Pitt gusta una vez más. Su frialdad traspasa la pantalla. Del resto del reparto destacar a Richard Jenkins, James Gandolfini y un Ray Liotta al que los años no parecen sentarle muy bien.

Todavía no he visto el anterior trabajo de Andrew Dominik, pero tras haber disfrutado de esta la pongo ya mismo en la cola de salida. El cine independiente norteamericano parece desmarcarse de aquellas histrias sencillas con actores prácticamente desconocidos. Cosa que, por qué no decirlo, es de agradecer. Un 6'5 sobre 10.

7 de enero de 2013

"Headhunters". Talento cazado.

Un thriller en toda regla. Verdaderamente el cine nórdico está aportando buenos productos de este género.

Su extraño protagonista va quitándose poco a poco el repelús que provoca en el espectador hasta hacerlo desaparecer y convertirlo en empatía pura y dura. La acción va aumentando conforme avanza el metraje, puede tener algún bajón de intensidad, pero dura tan poco que casi pasa desapercibido. 

Quizá es porque me gusta este tipo de cine, pero la recomiendo a todo el mundo que esté dispuesto a pasar casi 100 minutos de un cine escrito y dirigido con cabeza, con mucha cabeza, con talento, con mucho talento. Un film de cazadores y cazados. Un 8 sobre 10.

"Persona si te llamo amor". No sé si perdonarte.

Una película de guapo y guapas, de amores y desamores, de lo que importa y de lo que no, de verla en un momento de esos que no te apetece pensar en nada y además poder salir con una sonrisita después de verla o no.

Definitivamente ha intentado emular a "Manuale d'amore" de Giovanni Meronesi, pero aquélla era una comedia mucho más elaborada, al menos soltabas alguna carcajada entre pastel y pastel.

Me gustaría poder decir que el cine italiano actual sigue el ejemplo del cine galo, pero hoy en día, no le llega ni a las rodillas, ni aun intentando hacer re-makes; como muestra un botón: véanse "Bienvenidos al norte" -francesa- y "Bienvenidos al sur" -italiana-, luego ya hablaremos. Un 4 sobre 10.

"Una botella en el mar de Gaza". ¡No a la guerra!


Una joven francesa es la encargada de lanzar en una botella un interrogante que bien posee gran parte de la humanidad. ¿Por qué una guerra entre Israel y Palestina?. Una pregunta que, como siempre, se queda sin respuesta o, al menos, una respuesta creíble y contundente.

Una película bien narrada, no sobresaliente pero sí bien alto, entretiene hasta el final aunque realmente no aporta mucho más de lo que ya podemos saber sobre la situación actual en Gaza. Una manera simple e interesante de contar un conflicto desde el punto de vista de sus jóvenes. Un 6'5 sobre 10.

"El skylab". Un satélite me cayó.

Una historia de amigos y familiares que casi siempre aburren y, en muy pocas ocasiones, consiguen una pequeña sonrisita del espectador. 

El skylab, primera estación espacial estadounidense, amenaza con car en la costa oeste de Francia; hecho que no pasa inadvertido por ninguno de los personajes, cada uno de ellos con mayor o menor preocupación ante tal hecho. De hecho es en mi humilde opinión lo que nos mantiene intrigados durante todo el metraje. Esperas que en algún momento, lo que parece ser una dudosa comedia se convierta en una gran película de desastres.

Su directora y actriz, la extrañamente bella Julie Delpy ("Antes del amanecer", "Antes del atardecer", "Flores rotas"...), nos ha querido asombrar sin conseguirlo...No sé si ha querido emular a "Pequeñas mentiras sin importancia", pero ni se le acerca en calidad ni en guión. Un 4'5 sobre 10.

2 de enero de 2013

"De óxido y hueso". De sístole y diástole.

Jacques Audiard vuelve, tras su justísimamente premiada "Un profeta", con una historia de esas que no sabes si catalogar de amor, de superación, de drama humano,...pero que deberán pasar varios días para poder quitártela de encima. 

Cuando la vida te da un "hostión" (perdón por la expresión) es difícil aferrase a ella y más aún cuando los encargados de ayudarte necesitan aún más de tu ayuda. 

Con unos sutiles saltos en el tiempo Audiard se preocupa más del desarrollo de la historia que del propio final. En varias ocasiones conmueve, y mucho, pero en otras peca de cierta confusión hacia el espectador. Definitivamente estamos ante un buen (y no grandísimo) producto del cine francés, un cine en alza. Un 7 sobre 10,